Well-ordering (XII)

Qué tipo de facultad sería esa que crea lo que no es. Quiero proponer ahora que en materia de una incertidumbre reproduciéndose infinitamente no se habrá de tratar sobre la lógica del encadenamiento y, en cambio, se pensará en la naturaleza de esa facultad creadora. Veamos que el término real de su actividad sería un nuevo ser. Inicialmente podremos distinguir algunas operaciones, como las operativas, las imaginativas, las volitivas o las racionales: que serían otros términos a tener en cuenta, además del que ya hemos indicado de la nueva existencia creada. Con todo, tampoco se quiere ahora estructurar las relaciones entre estos términos porque nos conduciría, al fin y al cabo, hacia un esquema funcional. Se trata de pensar sobre qué puede significar que el ser humano sea libre y, por tanto, capaz de crear desde la nada. Porque, veamos, que habremos de orientar la cuestión en este mínimo donde si se es o no creativo es respondido. Y digamos que, por muy pequeñas que sean las cosas que nosotros pudiésemos crear, nada sería igual si no pudiésemos crearlas y nada de lo que hiciéramos no hubiese estado previsto por la propia dinámica del todo. No se trata de responder sobre si el todo cambia o sobre si la creación no existe (describiéndose un universo obligado a "valer" siempre lo mismo, como se afirmaría hoy en día por la física) sino de comprender qué puede significar que el universo del mañana no esté hoy en ningún sitio excepto en la libertad.

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