La presión fronteriza

La presión fronteriza es directamente proporcional a la diferencia que se separe, e inversamente proporcional al nivel de intercambio.

Me explico: Si se construye una frontera que separe dos mundos muy diferentes, la presión que sufrirá esa frontera será mayor que si los mundos que deja a cada lado son menos diferentes. Por ejemplo, si tenemos un barrio muy grande, en el que conviven personas con distintos niveles de renta, y se establece una frontera que delimita el derecho a la herencia según la edad de cada una, la medida soportará mayor presión si se establece una edad fronteriza alta que una baja. Será así porque cuanto mayor sea la edad que se establezca, menos ciudadanos tendrán derecho a heredar (lo que simplemente se comprende por virtud de la norma de la longevidad), y más ciudadanos verán frustrados sus expectantes intereses. En efecto, la diferencia entre unos y otros será mayor que si la edad que se establece es más baja; donde las personas al otro lado de la frontera, verán más cerca la posibilidad de traspasarla, o la verán más posible; o donde, al fin y al cabo, se observará que el tránsito de un lado a otro de la frontera, se produce en una zona de mayor fluidez.

Del mismo modo, se desprende que precisamente en el punto de mayor intercambio entre distintas posiciones que estén repetidas por individuos, será donde la presión fronteriza tenga menor intensidad. El ejemplo anterior vale por defecto.